La apertura de nuestra compañía data de 1980, año en el que la primera generación decidió apostar por la creación de un negocio propio donde desarrollar los conocimientos adquiridos en experiencias laborales anteriores. Se apostó por reinventarse y sacar hacia delante una empresa en un sector que contaba con poca especialización pese a su relevancia. Y así fue cómo surgió la idea de abrir una empresa dedicada a los suministros de cuerdas o cordelería, que atendiese a los profesionales del sector.
Con el trascurso del tiempo y nuestro saber hacer, Andaluza de Cordelería fue haciéndose cada vez más conocida gracias a los ideales que sus fundadores implantaron desde el primer momento. Una filosofía e ilusión que aún a día de hoy se mantienen intactas en nuestro trabajo y en nuestra familia.
El crecimiento que estábamos experimentando nos llevó, en la década de los 90, a trasladar nuestra sede central al municipio sevillano de La Puebla del Río, donde fundamos un nuevo hogar.
Todo este camino no es más que un ejemplo de las ganas de esta entidad por seguir mejorando. Nunca nos hemos quedado estancados, de ahí que nuestro personal haya crecido con nosotros. Además, trabajamos en unas instalaciones donde podemos desarrollar el trabajo de una manera mucho más eficiente que en épocas anteriores. Por su parte, la maquinaria también se ha ido adaptando a los tiempos, ahora es mucho más moderna y cumple con estrictos controles de calidad como los códigos de barras reconocidos por AECOC.